- Nombre científico: Áster.
- Nombre común: Áster. También puede encontrarse con los nombres de Amelio o cielo estrellado.
- Altura: menos de 1 metro.
- Necesidad de luz (alta, media o poca): alta pero no de manera directa.
- Temperatura: entre 18 y 25º C.
- Riego: moderado, de 3 a 4 veces a la semana.
- Abono: humus o cualquier fertilizante orgánico.
El áster es una de las especies que produce flores con pétalos numerosos y un centro en color distintos, por lo que se genera un hermoso contraste. Tiene preferencia por los climas templados y, de hecho, es capaz de resistir las heladas.
Su familia es bastante numerosa, encontrándose hasta 700 especies distintas para elegir la que más nos guste. ¿Te animas a darle vida a tu jardín con los más increíbles ásteres?
Características de los ásteres
Dentro del reino de las plantas, el áster es una especie versátil y hermosa que tiene la propiedad de ser elegida para distintas estaciones.
La razón de esto es porque en su amplia familia encontramos especies que florecen en primavera, otras en otoño y otras en verano.
Las características de las hojas son diferentes entre sí, encontrándose versiones con bordes dentados y otros lisos, mientras que algunas otras pueden tenerlas bastante simples.
En este último caso, la planta utiliza un mecanismo de protección bastante peculiar, eliminando la parte superior de la planta. Esta acción permite que se mantengan protegidas las raíces y tengan oportunidad de volver a vegetar y florecer en un próximo período.
Las flores tienen una estructura hermosa y robusta que se genera a propósito de los numerosos pétalos que rodean al centro. Estos pétalos pueden variar en color, encontrándose morados, rosas, azules y rojos.
El centro, por su parte, siempre es amarillo, presentándose más claro o más oscuro según el tipo de áster que se trate. Otro detalle importante que se debe mencionar sobre el áster es que su estructura resulta muy llamativa para los insectos que trabajan en el proceso de polinización.
Dentro de estos insectos se cuentan las mariposas y los colibríes, lo que contribuye al buen desarrollo de la vida en cualquier jardín.
¿Cómo regarlos?
El áster es una especie que necesita de altos niveles de humedad en tierra para mantenerse saludable.
Es por ello que se aconseja un riego moderado en cantidad de agua pero que se aplique hasta 4 veces a la semana.
Sin embargo, cuando está la temperatura ambiental muy elevada o está sometida a mucho sol, vale la pena subir los riegos hasta 5 veces a la semana. Lo importante es siempre verificar que el sustrato en el que esté sembrado se encuentra húmedo.
¿Cuál es la mejor estación para cultivar áster?
Sembrar áster en 5 pasos
- Realizar la correcta elección del lugar donde se vaya a sembrar, asegurándose que no sufra de corrientes de aire y que pueda estar protegida en invierno.
- Valorar el tipo de siembra a realizar ya que es una especie que le va bien tanto la siembra por semillas como por división de una planta madre.
- Preparar el espacio para sembrar con algo de materia orgánica y un componente que le ayude al terreno a drenar.
- Sembrar las semillas o las divisiones de la planta en el lugar preparado.
- Realizar un riego profundo para asegurar que la base de la semilla o de la planta reciba la humedad.
Cuidados necesarios del áster
El áster es una planta bastante noble que se hace capaz de soportar diversos estados de siembra, siempre y cuando tenga nutrientes a su disposición.
Pero uno de los cuidados que quizás sea más decisivo para su correcto desarrollo es que le gusta la libertad de la tierra de jardín.
Esto nos trae como consecuencia que no se sienta muy bien en maceta. De cualquier manera, es indispensable pensar en cómo se podría ver afectada por los cambios de temperatura que ocurren a lo largo del año.
Esta es una precisión válida sobre todo para los días de más calor de verano y de más frío de invierno, donde debería estar protegida.
La poda
La poda debe ser ejecutada en dos facetas bien diferenciadas:
- Después de la floración: se hace conveniente una poda de mantenimiento que facilite que la planta se desarrolle de la mejor forma posible en las próximas floraciones.
- En el otoño: durante esta época la ocupación irá en retirar las plantas marchitas y prepararla para el invierno realizando una poda hasta la base.
Plagas y enfermedades que atacan al áster
Una lamentable noticia es que el áster es bastante delicado ante la presencia de plagas de distinta naturaleza.
Dentro de las más comunes se encuentran los gusanos, los pulgones, orugas y hasta gorgojos.
En el plano de las enfermedades la situación no es más favorable porque también pueden presentarse algunas como el oídio o la traqueomicosis.
El combate de todos estos agentes nocivos debe ser realizado por medio de insecticidas y productos destinados a tal fin. También es conveniente asegurarse que el entorno de la planta esté lo más protegido posible, eliminando cualquier tipo de maleza.
Además, se deben evitar los encharcamientos pues estos son un ecosistema ideal para el crecimiento de hongos.
Significado de esta planta
Las flores que produce el áster están cargadas de delicadeza y buen gusto, se podría decir que hasta son elegantes.
Esta condición les ha permitido tener un cierto nivel de preferencia en relaciones amorosas que están consolidadas, sobre todo en personas más adultas.
Y es que con sus colores variados y el contraste que se genera entre los pétalos y el centro, los ásteres se hacen fáciles de generar gusto y agrado. ¿Habías pensado en tener alguna flor en el jardín que generara un impacto tan llamativo como sucede en este caso?
Pues si es así, ya sabes que con el áster todos tendrán algo positivo que decir sobre tu jardín.